Butaca de cuadros «Country chic»

En este primer post os mostraré el proceso de renovación de una butaca de perfil de madera.

Para estrenar las publicaciones del blog, no podría empezar de otra manera que enseñándoos la primera obra de Mutatis Mutandis, hace ya un par de años. ¡Esta preciosa butaca fue la causante de todo! Es una butaca con brazos de estilo Luis XVI que encontré en la basura. Su estado era bastante deplorable pero la madera estaba impecable, sin picaduras de polilla ni estragos mayores, por lo que inmediatamente vi su potencial.

Aquí tenéis a este patito feo que con un poco de esfuerzo se convirtió en un cisne. El proceso de transformación de esta butaca fue el siguiente:

1- Lijar la madera. Lo suficiente como para eliminar el brillo. En este tipo de piezas es mejor hacerlo con una lija de mano. Después, eliminar bien el polvo con un paño empapado en alcohol.

2- Aplicar la pintura. En este caso apliqué un esmalte mate en color blanco.

3- Decapar la pintura. Con una lija fina, frotamos suavemente las aristas de la pieza para decapar la pintura y así conseguir un efecto desgastado.

4- Barnizar. En aquel momento utilicé un barniz para madera incoloro. Lo cierto es que no era realmente incoloro, porque al final el barniz acabó por oxidarse y dar un color amarillento a la pieza. No es que haya quedamos mal pero no era el efecto que buscaba… En esto de la restauración y el reciclaje también se aprende de los errores, por lo que me bastó un sólo intento para entender que es mejor utilizar un esmalte que no necesite barnizado, o un barniz al agua con efecto encerado como el de la marca Titán para chalk paint.

5- Tapizar la pieza. Tras barajar varias opciones, opté por una tela de cuadros vichy en rojo que le da un toque «country chic» ideal. Es una tela barata y fácil de encontrar que capaz de otorgar personalidad a cualquier estancia. Para ello necesitaréis una grapadora profesional.

6- Por último, colocar la pasamanería. En esta caso elegimos un lazo de hilo color rojo. Poco a poco vamos colocando la cinta aplicando cola termofusible con una pistola de cola.

Aquí tenéis el resultado final. Un cambio radical que convierte a esta butaca en la protagonista de cualquier estancia y que encaja tanto en estilos de decoración más clásicos como más modernos, así como en habitaciones infantiles. ¡Espero que guste!